En Atlapexco, la vida es un Carnaval, agarra carretera y vive su tradicional carnaval el próximo 20, 21 y 22 de febrero.
Según la tradición local, durante el carnaval los difuntos son poseídos por ángeles malos que regresan al mundo, por ello se realizan ofrendas especiales. En el carnaval bailan personas con los rostros y cuerpos pintados con tizne o carbón, ceniza y tepetate; además, pueden usar colorantes vegetales con tonos usuales como amarillo, rojo, negro y morado.
La fiesta en este municipio siempre se lleva a cabo lunes, martes y miércoles, donde las y los bailadores son guiados por el capitán, danzan de casa en casa para formar rondas al ritmo del son de “Mecos” o “Pintados”, que hace alusión a su atuendo corporal y facial.
Al término de los bailes realizados entre las casas del asentamiento, las o los dueños de aquellos inmuebles que recibieron la visita de danzantes suelen obsequiarles algún recurso monetario o en especie como frijol, maíz o café.
En su despedida, las y los bailadores hacen sonar un cuerno o cuatecolomitl para alejarse de aquellas casas hospitalarias acompañados del son “El caballito”.
Su gastronomía con el tradicional zacahuil o pollo huasteco, así como el Xohol, dulce regional de masa endulzada con piloncillo envuelto en hojas de plátano.
El nombre de este municipio proviene de la palabra Atlapech, que se traduce como “balsa sobre agua”. Se encuentra a 192 kilómetros de Pachuca, que significan un viaje por carretera aproximado de 4 horas.